Evitar que los niños soporten un verano de carencias sanitarias y nutricionales a más de 50 grados de temperatura en el desierto de Argelia es uno de los objetivos que, en 1994, llevó a la Asociación de Amigos del Pueblo Saharaui en Sevilla (AAPSS) a organizar el proyecto ‘Vacaciones en Paz’. Desde entonces, decenas de menores procedentes de los campamentos de refugiados de Tinduf disfrutan de sus vacaciones durante los meses de julio y agosto con familias de acogida, que les proporcionan alojamiento y manutención, y reciben asistencia sanitaria. El proyecto no termina con el verano sino que se trata de un complemento a la educación impartida durante todo el curso académico en los centros escolares de sus pueblos.

El origen de esta iniciativa solidaria se encuentra a mitad de los años setenta cuando, debido al inicio del conflicto armado saharaui-marroquí, se ponen en marcha colonias infantiles estivales en la costa de Argelia con el objetivo de distanciar a los menores de la dura realidad de los campos de refugiados. En el verano de 1979, comienzan a llegar a España los primeros grupos reducidos de niños gracias a un compromiso del PCE y el Frente Polisario para apartar a los pequeños del sofocante calor del desierto y el sufrimiento de la guerra. En 1994, la Asociación de Amigos del Pueblo Saharaui de Sevilla, constituida sólo dos años antes, organiza la primera salida de 50 niños para que pasen sus vacaciones en hogares sevillanos. En años sucesivos, comienza la coordinación del programa a nivel regional a través de la Federación Andaluza de Asociaciones Solidarias con el Sáhara (Fandas). Desde entonces, unos 30.000 niños han sido acogidos por familias en más de 300 localidades por toda la comunidad.

Niños saharauis en los Centros Sociales de Miraflores (Sevilla)

Niños saharauis en los Centros Sociales de Miraflores (Sevilla)

Alrededor de 1.300 niños participan en el programa de este año. Los primeros en llegar a Sevilla aterrizaron en el aeropuerto de San Pablo el lunes 28 de junio. Los siguientes lo hicieron el 4 de julio. Comenzaron así unas vacaciones de dos meses alejados de la dureza de las altas temperaturas del desierto en los que también realizan actividades lúdicas y reciben una completa asistencia sanitaria. Además del convenio firmado con el Servicio Andaluz de Salud, se han firmado acuerdos para que los niños asistieran a revisiones odontológicas en la Fundación Luis Seiquer y oftalmológicas en Ruta de la Luz. Asimismo, todas las familias realizan actos colectivos como las visitas a Isla Mágica, al Museo Casa de la Ciencia y al Parque Municipal de Bomberos.

Aquellas familias que deseen acoger a niños saharauis durante los meses de verano pueden contactar con la AAPSS en el teléfono 954282205 o en el correo electrónico aapss@saharasevilla.org. 

Más de un millón de alimentos para el Sáhara

Además de las ‘Vacaciones en Paz’, la AAPPS organiza todos los años el programa Caravana por la Paz al Sáhara que consiste en la recogida de alimentos no perecederos, principalmente arroz, aceite y azúcar. Una vez recogidos, son llevados en caravana al puerto de Alicante, desde donde parten en barco hasta el puerto de Orán en Argelia. Llegados a este punto, son recogidos por la Media Luna Roja Saharaui y transportados en los camiones hasta alcanzar su destino final, los Campamentos de Refugiados Saharauis en Tinduf.

Caravana por la pazLa primera caravana piloto de Sevilla sale en 1993 y consta de una furgoneta cargada con 300 kilos de alimentos no perecederos, recogidos en la periferia de la ciudad. En 1994 ya son siete los camiones y otros vehículos procedentes diversas comunidades del país, dos de ellos de la capital andaluza. Tres años después se organiza, a iniciativa de la AAPSS, la primera gran caravana andaluza, con participación de todas las provincias de la comunidad autónoma, con un total de 30 vehículos con 600.000 kilos de productos. Sevilla aporta 5 camiones, un autobús, una ambulancia y 5 coches nuevos. En años sucesivos, cada mes de febrero, la Federación Andaluza de Asociaciones Solidarias con el Sahara envía caravanas de camiones a los campamentos, hasta cubrir el millón de kilos de alimentos.