Eran los años noventa y un nuevo sonido marcaba el cambio en la música española. Atrás quedaban la locura ochentera, las canciones despreocupadas, los aires de fiesta que no acaban. Conceptos como la Movida empezaban a sonar antiguos, manidos, y la industria del disco caminaba por unos derroteros comerciales muy diferentes a los de la juventud de la nueva década.
A las ya existentes, como Dro, se sumaron un nuevo número de discográficas independientes que dieron salida a una emergente hornada de bandas que se miraban en Gran Bretaña. Y en estas estábamos cuando una nueva palabra, “indie”, se coló a través de las emisoras, en las tiendas de discos y en las salas de conciertos para acompañarnos hasta nuestros días.
Capitaneado por Los Planetas desde Granada, uno de los focos más importantes de esta nueva música, el movimiento gozó desde el principio de un notable protagonismo en Andalucía, donde surgieron bandas como Señor Chinarro, Lori Meyers, Niños Mutantes, Lagartija Nick, 091, Niño Burbuja… Entre ellos, la formación sevillana Maga se consolidó ya llegados los dosmiles como una de las apuestas de culto más interesantes. Un pop que remitía a los Radiohead de Ok Computer con letras construidas desde la sentimentalidad poética.
«Hemos vuelto siendo consecuentes»
Ahora, tras celebrar su decimoquinto aniversario entre amigos, con dos días de concierto y entradas agotadas en Madrid el pasado marzo (una cita en la que se acompañaron, entre otros, de Iván Ferreiro, The New Raemon y Xoel López), los sevillanos regresan con un nuevo disco, Salto horizontal, el primero tras tres años sin nuevas canciones y parón de un año. Pasado ese tiempo, cuenta Miguel Rivera, el cantante, guitarra y teclista, la banda volvió a componer melodías que sonaban a Maga y sólo entonces decidieron regresar; «Hemos sido honestos y consecuentes. Si estamos aquí de nuevo es porque había cosas que contar».
Tras pasar por varias formaciones como Long Spiral Dreamin’ Rivera, que había sido teclista de Australian Blonde, otra de las puntas de lanza del indie noventero, se une a David García y Javier Vega y forma una primera banda con voz femenina. Tras la marcha de la cantante, Miguel asume el papel de frontman y los tres miembros replantean el concepto de la formación bajo un nuevo nombre, Maga, en honor a la protagonista de Rayuela, la obra maestra de Julio Cortázar.
En este contexto entra en juego el productor Paco Loco, que les vincula al entonces casi neonato sello Limbo Starr. Entusiasmado con las primeras canciones de Maga, la discográfica les propone un primer EP, Bidimensional (2001), que fue loado por la crítica y considerado uno de los mejores del año para Rockdelux.
Al año siguiente, otra vez de la mano de Paco Loco, llega Maga, su primer disco, al que se le conoce como «el blanco». Su apuesta quedó definida: los problemas de todos los seres humanos pero narrados desde una hondura lírica poco habitual en el género, el amor, la angustia y la búsqueda de identidad de la pubertad y la primera juventud pero levantados a través de las metáforas complejas de Rivera y Vega. Su canción Agosto esquimal goza hoy de la categoría de clásico de la época.
Popularidad en aumento
Crecieron sus fans, las buenas críticas y su paso por festivales como el de Benicassim. Y, dos años más tarde, llega Maga (Limbo Starr, 2004), conocido como “el negro”, un trabajo acaso más oscuro y ambicioso que les sitúa en lo más alto de la música independiente. Tras el reconocimiento nacional, también llegó el de su casa, Sevilla, donde su música empezó a inspirar a una nueva hornada de músicos.
Gracias a su popularidad, fueron elegidos para una gira latinoamericana dentro del marco del proyecto de la SGAE denominado Rock en Ñ. En ese viaje, los componentes descubren que su proyecto ha cruzado el Océano y que gozan de seguidores en América Latina.
El tercer disco, de nuevo titulado Maga (Limbo Starr, 2006), pero conocido como “el rojo”, resultó ser un trabajo más directo y potente para el que se rodearon de varios colaboradores, como Germán Coppini, Florent (Los Planetas) y Andrea Echeverri (Aterciopelados). Este disco les impulsa definitivamente a América, donde realizan varios conciertos y reeditan su tercera aventura discográfica con el sello argentino Ultrapop.
Cambio de sello
La discográfica Mushroom Pillow les ficha en 2008 y con ella lanzan A la hora del sol. Como despedida, Limbo publica 2001-2008 (Limbo Starr, 2008), CD +DVD que repasa la trayectoria del conjunto sevillano. Y este no es el único cambio, pues Pablo Cabra toma el relevo de David García a la batería.
En su primer disco con Mushroom, Maga continúa erigiendo letras basadas en problemas existenciales y relaciones, que vuelven a darse en el segundo título con este sello, Satie Contra Godzilla (2011). Un trabajo grabado en los Estudios Ultramarinos de Santi García y coproducido por el grupo y Ramón Rodríguez (The New Raemon) en el que las guitarras ganan protagonismo.
https://www.youtube.com/watch?v=J4TnQ8ZWBDY
Después de esta referencia, las nuevas canciones tardaban en llegar y, tras un tiempo involucrados en otros proyectos, los miembros del grupo deciden darse un descanso que anuncian a sus fans como «indefinido». Sin embargo, pronto empezaron a llegar composiciones con ecos de Maga que les hicieron recuperar las ganas. Se acercaba el decimoquinto aniversario de la formación y la efeméride hizo las veces de catapulta.
Se pusieron manos a la obra con su nuevo álbum, Salto horizontal, que verá la luz el próximo 24 de febrero, y reeditaron en 2016 su primer título, esta vez rodeados de amigos. Iván Ferreiro, Julio de la Rosa, Jero Romero, Dani (Pony Bravo), Manuel Cabezalí, Xoel López, The New Raemon, Zahara, Juan Alberto (Niños Mutantes), Carmen Boza y Noni (Lori Meyers) reinterpretaron clásicos de aquel debut como Diecinueve, Agosto esquimal y Primer vuelo. Finalmente, dos noches de conciertos en Madrid, en la sala Joy Eslava, junto a todos estos compañeros, trufaron el cumpleaños.
Ahora, la banda cierra el aniversario con un nuevo concierto en Sevilla, este miércoles en el Teatro Central, a cuyo escenario se subirán otros colaboradores, esta vez andaluces. Así, Zahara, Anni B Sweet, Juano Azagra (All La Glory), Javi Palencia (Full) y Paula Padilla (O sister!).
Maga acaba de presentar el segundo single del disco:
