Aunque se tiende a pensar que el sector de la robótica sólo se genera en los países asiáticos, la realidad no es esa. Un buen ejemplo de ello es Macco Robotics, empresa sevillana fundada y dirigida por Víctor Martín, especializada en ingeniería robótica para la educación, el ocio, el turismo y el ámbito sanitario. Ha sido seleccionada en junio de 2016 en el certamen Automatica, que se celebra en Munich (Alemania), como una de las 20 startups de robótica más relevantes del mundo. Además de crear el software y hardware de Macco, la empresa contribuye tecnológicamente con otras compañías como Aldebarán, desarrollando aplicaciones para su robot estrella, Nao, y comercializa un humanoide capaz de reducir en hasta un 50% la sensación de dolor de los niños hospitalizados y de aumentar las tasas de vacunación en un 10%. MEDi, nombre que recibe el robot sanitario, habla o cuenta cuentos contribuyendo así a que los más pequeños permanezcan distraídos durante algunos procesos dolorosos, como puede ser una cura, fomentando la cooperación de los pequeños en los procesos médicos.
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Macco Robotics facturó en 2014 alrededor de cinco millones de euros, una cifra que ascendió en un 40% de 2014 a 2015 y tiene previsto que se eleve un 200% en 2016. Su plantilla está compuesta actualmente por siete personas entre ingenieros electrónicos, mecánicos y de sistemas. Preven incrementar el equipo hasta los 17 empleados en un periodo corto de tiempo. Además de su sede en Sevilla, posee oficinas en Barcelona, Madrid, Londres y próximamente en Dubai, donde sus robots han obtenido una gran acogida. La mayoría de las ventas se realizan con países extranjeros, entre los que destacan los Emiratos Árabes. En España, Macco ha llegado a acuerdos con centros comerciales para vender robots al precio de 400 euros, pensados para que cualquier familia los utilice en el hogar con fines educativos. Por otro lado, en su gama de robots humanoides más complejos para ser utilizados por empresas, los más vendidos suelen tener un precio de 25.000 euros.
Capacidad de adaptación a la crisis del mercado
En un principio, Macco Robotics era una empresa especializada en robótica industrial. Con la llegada de la crisis del 2007, la actividad cayó de forma vertiginosa. Macco Robotics tuvo que hacer frente a los impagos de clientes que se habían visto obligados a cerrar sus negocios arrastrados por la situación económica. En este contexto, Víctor Martín, director general de la empresa, decide darle un giro de 180º a la compañía. Renacer o morir, esa era la cuestión. Sin dejar la robótica, Macco Robotics cambió el sector industrial por el humanoide, especializándose en hostelería. Con el deseo de acercar la robótica humanoide a las personas, en 2013 comercializaron el primer robot desarrollado íntegramente por ellos, Macco. Además, la ‘startup’ contribuye en el desarrollo de programas para los robots Nao y Furo.
El ‘barman’ Macco, primer éxito
¿Qué pasaría si sale un sábado noche de copas, entra a un pub, y tras la barra le espera un robot humanoide listo para prepararle un ‘gin tonic’? ¿Ciencia ficción? Es real gracias a Macco. El robot-barman está capacitado para preparar cócteles en menos de tres minutos, mientras baila al son de la música. Gracias a su pantalla táctil, el usuario puede seleccionar entre una amplia variedad de copas su bebida favorita.
“Toda tecnología debe tener una aplicación, de lo contrario no sirve para nada”. Bajo esta premisa, y pensando en la utilidad y rentabilidad en el sector de hoteles, restaurantes y eventos, Macco Robotics decidió que el uso de su primer humanoide fuera servir copas. Además de incrementar el valor añadido de la compañía, en tanto que es una forma distinta de que los usuarios interactúen, en el caso de los hoteles Macco proporciona un servicio 24 horas, gracias al cual el cliente puede adquirir cualquier tipo de bebida en cualquier momento.
Este humanoide simula a una persona de tronco hacia arriba, contando con extremidades, torso y cabeza, y cuenta con 15º de movilidad, 11º más que el ser humano. Parte de la fabricación se realiza en Sevilla, concretamente en la localidad de Santiponce, otra se subcontrata y se fabrica en Japón. Una de las virtudes de Macco es que es fácil de transportar. El robot está situado en una plataforma que facilita su traslado de un lado a otro, pudiendo acudir a todos los eventos que se desee dentro de un mismo día. Su precio se sitúa entre los 90.000 y 150.000 euros y el comprador puede personalizar la vestimenta de Macco, pudiendo vestirlo de Papa Noel, pirata, camarero… Además de crear cócteles, existe una versión de este humanoide capaz de tomar comandas y llevar pedidos en restaurantes, y un Macco crupier, pensado para los casinos.
Aunque la presencia de este humanoide es cada vez más común en España, siendo habitual verlo en espacios de ocio como el parque de atracciones PortAventura, sus principales clientes se encuentran en los Emiratos Árabes, donde, en palabras de Víctor Martín, “no hay tanto miedo como en España a lo nuevo”. Con motivo de la Expo 2020, que se celebrará en Dubai, Macco Robotics será el encargado de robotizar lo que se ha denominado ‘distrito 1’, una ciudad dentro de la propia ciudad, donde las tecnologías cobrarán un papel fundamental. Está previsto que la empresa sevillana monte restaurantes, puntos de información… todo robotizado, en lo que Macco jugará un papel fundamental.
Experiencia con niños en un hospital de Canadá
En su afán por innovar, Macco ha creado a MEDi, el primer humanoide especializado en el ámbito sanitario. El robot ya está presente en en el Hospital Infantil Alberta de Canadá, donde está demostrando ser el complemento ideal en el día a día de los niños hospitalizados. Dicho hospital, en un trabajo conjunto con la Universidad de Calgary, inició esa experiencia para probar si los niños que sufren más estrés y ansiedad cuando son tratados, asumían mejor las pruebas médicas si a la vez estaban interactuando con un robot. El balance es muy positivo: más de un 50% menos de dolor. Tras esta experiencia avalada por una institución médica de prestigio, Macco Robotics pretende introducir a MEDi en el sistema sanitario español. La empresa se encuentra en conversaciones con los responsables del Hospital Virgen del Rocío, en Sevilla, el mayor y más importante de Andalucía. De cerrarse el acuerdo, sería la primera vez que un humanoide está presente en el ámbito sanitario español.
Desarrolladores de aplicaciones
Además de Macco, la compañía desarrolla aplicaciones para otros humanoides. Es el caso de Nao, un robot propiedad de la empresa Aldebarán, de la que Macco Robotics es socio tecnológico para España, Emiratos Árabes y Qatar. Nao es un ‘smartmachine’, una máquina inteligente, de apenas 58 centímetros de altura y con capacidad para reconocer, interactuar e incluso hablar con el ser humano.
Existen aplicaciones específicas para el funcionamiento de Nao, igual que hay app para nuestros móviles inteligentes. Gracias a estos programas el robot puede contar cuentos, enseñar idiomas e incluso bailar el ‘Gangnam style’. La versatilidad del robot ha fomentado que sea un buen aliado en el proceso educativo de los niños, especialmente de niños autistas. Está demostrado que los pequeños con problemas de aprendizaje prestan más atención a un robot que a una persona, lo que facilita su instrucción.
Con la finalidad de acercar la robótica al sector de la hostelería, Macco Robotics está trabajando en un paquete de programas para Nao que le permita interactuar con los huéspedes para indicarles dónde pueden comer, qué deben visitar… La idea es que en cada habitación Nao esté presente, contribuyendo también a agilizar procesos de gestión como el ‘check-out’ del cliente en sus trámites de salida del establecimiento hotelero.
Además de este humanoide, Macco Robotics desarrolla el software de Furo, un robot ideal para eventos, centros comerciales, tiendas… Furo está programado para dar información a tiempo real de lo que el usuario desee, como la cartelera del cine o las ofertas del supermercado. Gracias a su pantalla táctil, el cliente puede ver los productos promocionados por el establecimiento e incluso comprarlos directamente.